Si tengo que agradecerle a alguien los conocimientos que tengo sobre la vida conciertil musical es a mi mejor amigo Danipop. Él es el master de masters en estos temas y es con quien he pasado horas siendo aplastada con tal de ver más cerca a grupitos pop que después de su One hit wonder, sólo él y yo recordaríamos. Gracias a él aprendí a defenderme de los agarra traseros y de los rasguñadores, a aprovechar las olas para acercarnos más a los escenarios, a bajar al piso para respirar mejor, a no dejar escapar los productos que venden entre la masa porque después ya no vuelven y a que a veces la reventa es mejor que la preventa...Sus consejos y enseñanzas han hecho inolvidables los conciertos a los que he ido con él y sin él. Tengo que aceptar que cuando salté la bardita que dividía la zona exclusiva a la MÁS exclusiva del concierto de Oasis y logré estar hasta adelantitito y ver a Liam y las gotitas de saliva que salían de su boca pensaba en tooodo lo que Danielo me había entrenado esos años para aprovechar la oportunidad y dejar de lado mi miedo a romper reglas.
Asistir a conciertos en el Pueblo tiene grandes beneficios, sé que no vienen los meros meros pero bueno, la Ciudad está a una hora de distancia para esos casos. Los precios son mucho más bajos y los lugares mucho más pequeños, así que con poco dinero se puede estar realmente muy cerca. Por alguna razón extraña la gente pueblerina se asusta de que vengan los artistas a tocar por estos rumbos y huyen y bloquean su mente para no ir y entonces los boletos terminan siendo rematados o arrojados como papelito de carnaval por alguna avioneta que promueve el evento con desesperación, así que los veinte o treinta Open mindeds que nos atrevemos a ir terminamos disfrutando de casi un concierto privado perteneciente a una gira que en la Ciudad terminaríamos viendo como hormigas rockeras desfalcadas. De verdad, acá casi se bajan del escenario para saludarte de mano y agradecer el tiempo que te tomaste por haber asistido a su concierto.
La frase memorable de este fin se escuchó entre gritos de Papa ra papa eo eooos: ¡Pueblerinos! Disfruten de la música, bailen, canten, echen desmadre, vamos...corran, que al cabo ¡Hay un chingo de espacio!
Y sí, había mucho espacio....La noche totalmente estrellada, una mano herida por la rebeldía enseñada por Danielo y algunas maripositas en la panza porque definitivamente el ¡Amor es bailaaar!
La frase memorable de este fin se escuchó entre gritos de Papa ra papa eo eooos: ¡Pueblerinos! Disfruten de la música, bailen, canten, echen desmadre, vamos...corran, que al cabo ¡Hay un chingo de espacio!
Y sí, había mucho espacio....La noche totalmente estrellada, una mano herida por la rebeldía enseñada por Danielo y algunas maripositas en la panza porque definitivamente el ¡Amor es bailaaar!
4 comentarios:
Sniff
mi pequeña es toda una mujercita...
te adoro
p.s. poco a poco voy mejorando
me ha gustado lo del skype, pero luego se ha quedado bloqueado
Epaleeee!
Eso de "papa ra papa eo eoooos" tambien lo escuche recientemente en Osaka, ajuaaa... y no se si sea que la gente les huye por su fama o definitivamente los cafetos no tienen suerte para llenar lugares medios crazys (como el de Xochitepec, jejeje).
Tambien tuve mi lugar VIP en la tarima y "trasbambalinas" cantando y alardeando con mi banderisima mexicana a todo lo que dio.
Oyeee, por cierto, pero si, tenemos que ir a algun conciertin juntos y mira que yo tambien soy mega escapadizo, que ni el mismo Gaudini me ganaria, jajaja!
Abrazooos y besos!
La huída de los Pueblerinos a asistir a los conciertos es independiente del artista que se presente, mi querido Profe.
omg!!!..
amo tu blog!!
está tna lleno de... vacas!!! ^o^
y yo ke las amo!!.. me encantan!
espero no te moleste ke te siga leyendo.. *u*
saludos!
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